Si bien She's Given Up Talking no retrata ninguna experiencia propia de Paul sobre su atormentado presente, su construcción musical la hace una de las más amargas de su discografía.
La historia se basa en una una niña, quien de buenas a primeras dejó de hablar en la escuela. No emitía palabra alguna, no daba respuestas. Paul tuvo trato con la familia, a tal punto que algunos de sus hermanos cabalgaron por la granja de Sussex. De vacaciones por Jamaica, Paul apeló a la situación de la niña para inspirarse en un nuevo tema. "La idea de que un día alguien decida no hablar más es un poco loca, pero es valiente", rememoró McCartney en su libro The Lyrics.
La canción contiene la frase "Not a dickie bird", que en la jerga cockney significa "ni una palabra". En este caso, Paul se remitió a sus jóvenes días en Liverpool, cuando solían emplearla en juntada con los compañeros de clases. "Es bonito encontrarse esa frase cuando la anterior es 'Don't Say A Word'", indicó Paul. Evidentemente, McCartney tiene cierto apego, consciente o no, sobre la acción de silenciar las palabras. Su frase "Say No More", en la película Help!, quedó para la posteridad, especialmente en la Argentina. El prócer de estas pampas Charly García la tomó prestada por un largo tiempo. Así se llamó uno de sus discos y se la apropió como una suerte de mandamiento o estilo de vida.
Paul dijo que no habló con la niña sobre su silencio, sí lo hizo con la familia, a quienes les comentó sobre la canción. Tiempo después, la niña fue creciendo y dejó de lado el "mutismo selectivo" que originó la inspiración de McCartney.
Durante las sesiones de Driving Rain, en su regreso a los estudios después de Run Devil Run, Paul preparó demos para trabajarlos con el resto de la banda. She's Given Up Talking se diferenció porque Paul la presentó sin previo aviso. "Dije: 'bueno, vamos a hacer esta canción'. Eso me dio un poco de libertad y no tuve que terminar la canción diez minutos antes de la sesión. Sabía lo que quería para el puente, así que lo terminé rápido", explicó McCartney para su página web.
El tono cadencioso y lúgubre de She's Given Up Talking se emparenta bastante con Rushes, el segundo álbum de The Fireman, el proyecto que Paul compartió con Youth. Algo de ese estilo se quedó en la composición de Paul, en tiempos musicales que ya se diferenciaban de los noventa.
La influencia del productor David Kahne hizo lo suyo. She's Given Up Talking comienza con cintas al revés, en un estilo emparentado con los experimentos de Los Beatles para Revolver, un detalle que se dio casi por casualidad y dejó conforme al propio Kahne. Es una canción de índole espontáneo, a tal punto que incluye de un diálogo entre Paul y Rusty Anderson, captado de manera accidental.
McCartney, a cargo de la guitarra Martin acústica, utiliza acordes menores en She's Given Up Talking, que forjan su carácter oscuro e intimista. Los efectos en la voces están muy presentes y también alcanzaron a las líneas del bajo Höfner, impregnadas de fuzz. Algo similar a lo que McCartney ejecutó en la composición de George Harrison Think For Yourself, y que repitió el año pasado, a instancias del productor Andrew Watt, para Bite My Head Off, en la colaboración para los Rolling Stones.
Letra de She's Given Up Talking
She's given up talking
Don't say a word
Even in the classroom
Not a dickie bird
Unlike other children
She's seen and never heard
She's given up talking
Don't say a word
You see her in the playground
Standing on her own
Everybody wonders
Why she's all alone
Someone made her angry
Someone's got her scared
She's given up talking
Don't say a wordAh but when she comes home
It's yap-a-yap-yap
Words are running freely
Like the water from a tap
Her brothers and her sisters
Can't get a word in edgeways
But when she's back at school again
She goes into a daze
She's given up talking
Don't say a word
Even in the classroom
Not a dickie bird
Unlike other children
She's seen and never heard
She's given up talking
Don't say a word
She's given up talking
She don't say a word
Don't say a word
FICHA
Track 3 del disco Driving Rain (2001).
Registrada el 17 de febrero de 2001 en los estudios Henson de Los Ángeles, Estados Unidos.
Paul McCartney: Voz, bajo, guitarra acústica, batería
Rusty Anderson: Guitarra eléctrica, Leslie pedal
Abe Laboriel Jr.: Percusión electrónica
Gabe Dixon: Hammond
David Kahne: Guitarra eléctrica
Registrada el 17 de febrero de 2001 en los estudios Henson de Los Ángeles, Estados Unidos.
Paul McCartney: Voz, bajo, guitarra acústica, batería
Rusty Anderson: Guitarra eléctrica, Leslie pedal
Abe Laboriel Jr.: Percusión electrónica
Gabe Dixon: Hammond
David Kahne: Guitarra eléctrica
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