"Me entristeció mucho saber que Jeff Beck había muerto. Jeff Beck era un hombre encantador con un perverso sentido del humor que tocaba parte de la mejor música de guitarra que jamás haya salido de Gran Bretaña. Era un técnico soberbio y podía desarmar su guitarra y volver a armarla a tiempo para el espectáculo.
Jeff tenía un gusto inmaculado en la mayoría de las cosas y era un experto en reconstruir su colección de autos. Su actitud sensata hacia el negocio de la música siempre fue tan refrescante y apreciaré para siempre los momentos que pasamos juntos.
Jeff Beck ha dejado el edificio y es un lugar más solitario sin él. Dios bendiga a Jeff y su familia. Con amor, Paul"
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